El vino es un sector estratégico y destacado dentro de la economía global del país. El sector español es líder en superficie mundial de viñedo, tercer productor y primer exportador en volumen. Asimismo, su actividad y su amplia cadena de valor supone un importante peso en la economía nacional generando más 23.700 millones de euros anuales, equivalentes al 2,2% del VAB nacional.
Además, su aportación económica a las arcas públicas es superior a los 3.800 millones de euros anuales y a su alrededor se crean más de 427.700 empleos de forma directa e indirecta. Estas son las principales conclusiones del estudio ‘Importancia Económica y Social del Sector Vitivinícola en España’ elaborado por AFI (Analistas Financieros Internacionales) para OIVE (Organización Interprofesional del Vino de España).
El estudio ofrece una clara instantánea de dónde se encuentran los desafíos más inminentes. «El acceso a los mercados exteriores, la adaptación a una producción más respetuosa con el medio ambiente que haga frente a los retos del cambio climático, así como el fomento de la calidad y el diseño de una estrategia sectorial que consolide la estabilidad del sector van a marcar la hoja de ruta de los próximos años», según el ministro de Agricultura, Luis Planas
La cadena de valor del sector vitivinícola involucra a una numerosa y diversa red de agentes. Así, la vitivinicultura contabiliza más de 4.000 empresas productoras y elaboradoras de vino, y una inmensa red de establecimientos de distribución y venta de productos. A su vez, genera un efecto tractor sobre otras muchas actividades suministradoras clave, como la industria de la madera, del vidrio, del corcho, o la fabricación de maquinaria y equipos industriales, entre otras.
Además, las empresas y organizaciones del sector del vino también son promotoras y partícipes de iniciativas de investigación e innovación en materia medioambiental, de procesos y productos, comercial, entre otras. Un esfuerzo que se traduce en la modernización y ampliación de las instalaciones, a lo que se dedican más de 570 millones de euros anuales, así como en actividades de I+D+i. El sector vitivinícola es un importante exponente del sector exterior español, de hecho, es el principal exportador mundial de vino en términos de volumen, y el tercero en valor. Los productos vitivinícolas españoles están presentes en 189 países, de los cuales 86 realizaron compras superiores al millón de euros en 2019. Las exportaciones españolas de productos superaron los 3.000 millones de euros el año pasado, situándose el vino en el top-5 de los principales productos exportados por la industria agroalimentaria española.
Además de los datos cuantificables, el informe también ha contado con entrevistas a personas relevantes del sector para conocer su valor cualitativo. En ese aspecto el informe hace hincapié en su arraigo territorial y en su capacidad para ser generador de valiosos intangibles para el país.